Como muchos otros lugares que aparecen en los mapas sin que sepamos a ciencia cierta el porqué, Allariz se ha ganado por derecho propio a estar, tanto a través de la historia pasada como por los esfuerzos que se han hecho para darle un presente y un futuro mejor, donde todo el mundo ha puesto algo de sí para salvar las incertidumbres que suelen rodear el futuro que en este lugar era, hace tiempo, muy incierto.
No tenemos restos muy antiguos en este lugar, como en muchos otros de Galicia, siendo casi imposible ir más allá del megalitismo, y esta tierra ácida que deshace hasta el granito más duro es una de las responsables de nuestra corta edad. Sin embargo sabemos, por otros puntos del territorio, que pululaban por aquí nuestros ancestros en la época Achelense y posiblemente antes, de hecho en las Gándaras de Budiño se han encontrado restos que pueden perfectamente ser anteriores a los 150.000 años.
Pero centrémonos en Allariz. Dicen que fue un señor suevo llamado Alairico el fundador de esta villa y corte. Tiene su lógica si pensamos que a los suevos se les atribuye el haber convertido las espadas en arados, dándose en este período el fenómeno del abandono de una buena parte de los castros, dado que habiendo paz la lógica nos hace aproximarnos a los centros de producción tanto agrícolas como “industriales”.
En cualquier caso en los alrededores de Allariz disponemos de restos arqueológicos para saber perfectamente que los asentamientos humanos ya existen posiblemente antes del 2000 a.C. La presencia de antiguos castros como el de Armeá (podéis visitarlo) que podemos decir que tuvo vida entre el s.II a.C. hasta aproximadamente el s. IV de nuestra era. Sin embargo a nosotros nos interesa qué ocurre después, pues su importancia va unida a la monarquía: Alfonso VI ordena la construcción de castillo y muralla. Alfonso VII dota de fueros a la villa, que la ciudad no tenga otro señor que el rey o su delegado, que son una transcripción casi completa de los fueros de Sahagún (reproduce de él, unos 21 capítulos). Nos interesa porque el legado de dicha época es enorme. Doña Violante, esposa de Alfonso X “el sabio” ordenó la construcción del convento de Santa Clara donde quiso ser enterrada –tras su muerte. Hoy, tras las obras del s.XVIII posee un claustro de 3.600 m2, dicen que el más grande de España (con un museo de arte sacro que no os podéis perder) que honra la villa donde Alfonso X se crio y educó, aprendió a expresarse y a escribir en gallego (sus cantigas son excelentes).
El convento es un lugar ideal para comenzar a conocer Allariz, pues cerca se encuentra la iglesia de San Benito, en dirección contraria la iglesia de Santo Estevo y de aquí a la Plaza Mayor donde tenéis la iglesia de Santiago de estilo románico… Aunque si os decimos la verdad da igual por dónde comencéis, se trata de un Conjunto Histórico impresionante, merece la pena perderse un poco por sus rúas para sentir el encanto de una villa unida a la poesía medieval, a los judíos, a las órdenes religiosas, a los reyes…
Este maravilloso lugar posee una riqueza patrimonial tan impresionante que es un museo en sí mismo, pero entre el siglo XX y el XXI se han sumado a esta colección los juguetes, la moda y la industria del cuero.
Si dispones de un día para perderte un poco tienes que visitar Allariz. Callejea, come, visita sus museos… Terminarás queriendo mucho más, ¿y sabes lo mejor? Que sabemos que lo tiene.